El metro de Madrid se convertirá en el nuevo centro comercial de la capital española

En apenas unos meses puede que la capital española disponga de un nuevo centro comercial; el tradicional metro de Madrid se convertirá en todo un entramado de comercios, tiendas, supermercados y restaurantes que acompañarán a los usuarios del transporte público subterráneo. Por el momento, las instituciones gubernamentales madrileñas ya han comunicado la reconversión de 12.500 metros cuadrados de zonas comunes.

El metro de la ciudad de Madrid está considerado como uno de los mejores medios de transporte que existen en Europa. Quizá por ello hace algunos años se optó por aportarle valor añadido en forma de espacio cultural y comercial. Ahora, la Consejería de Transportes de la Comunidad de Madrid trabaja en la redacción de un decreto que permitirá un mayor aprovechamiento comercial y lúdico de sus instalaciones. Se espera que esta nueva normativa entre en vigor el próximo año 2015 por estas fechas, cuando saldrán a concurso público o subasta los locales disponibles, que acapararían el 25% de la superficie disponible en la red del metro.

Regularización de estado

En la actualidad hay unos treinta comercios que ya operan en el suburbano de la capital y que tienen contratos en vigor válidos hasta el año 2019. Según han señalado las autoridades pertinentes, estos comercios carecen de licencia de apertura y de funcionamiento, por lo que se podría decir que son, en cierto sentido, ilegales.

Con la nueva legislación, que entraría en vigor el próximo verano, no sólo se regularizarían todos estos locales, sino que además se establecerían criterios igualitarios para todos los inquilinos. No obstante, la Asociación de Autónomos y Comerciantes de Metro no comparte esta visión, y señala que las franquicias van a ser las mayores beneficiadas con el nuevo decreto.

Asistencia asegurada

Debido a su funcionalidad y estructura –da servicio a trece municipios de la Comunidad de Madrid-, el metro de Madrid recibe a unos 600 millones de viajeros, muchos de ellos turistas que tienen interés por visitar las tiendas que hay repartidas a lo largo y ancho de los 1.080 metros cuadrados de superficie subterránea. Estas visitas se traducen en un valor de 2,2 millones de euros que podrían incrementarse hasta los 100 millones con la apertura de nuevos locales.